AÑO 2022: ALIMENTOS E INDIGENCIA SUBEN SIN PARAR

*Por Isaac Rudnik

Los alimentos en los barrios aumentaron 91% en el último año y desde 2019 la indigencia no baja del 8% de la población. Según el INDEC desde que asumió el gobierno actual aumentó un 10% la cantidad de indigentes en todo el país.

Según el relevamiento mensual de precios de los 57 productos de la Canasta Básica de Alimentos (CBA) en 900 comercios de cercanía en los barrios populares del conurbano bonaerense, la suba de estos productos en septiembre pasado fue de 5,40%, mientras que en los últimos doce meses el incremento alcanzó al 91,55%. Una familia de dos adultos/as y dos hijos/as en septiembre de 2021 necesitaba para adquirir sus alimentos indispensables para un mes, $28.803,84 y en el mismo mes de este año requirió $55.172,38.

Variación del valor de la Canasta de Alimentos para una familia de cuatro personas, según datos obtenidos por nuestro Índice Barrial de Precios de septiembre 2022.

Desde septiembre del 2021 los precios del rubro verduras y frutas aumentaron más del 124% %, los productos de almacén subieron 93,92% y las carnes se incrementaron cerca del 73,86%.

Variación por rubros de los precios de la Canasta de Alimentos, según datos obtenidos por nuestro IBP de septiembre de 2022.

PORQUÉ LA INDIGENCIA NO BAJA DEL 8 % DE LA POBLACIÓN DESDE HACE CUATRO AÑOS

En la última semana de septiembre el INDEC dio a conocer los datos de pobreza e indigencia del primer semestre de 2022; se reflejan en ellos el afianzamiento de un modelo de desarrollo que consolida un porcentaje de población bajo la línea de pobreza que en los últimos cuatro años oscila entre el 32 y el 42%. Pero, quizás lo más grave sea que en los últimos tres semestres, que fueron de continuo crecimiento del PBI, el porcentaje de argentinos/as indigentes (o sea las personas que no tienen recursos suficientes para adquirir sus alimentos indispensables) no desciende del 8%. Es más, en esta primera parte del 2022 volvió a crecer significativamente.

Cuadro de confección propia de acuerdo a datos del INDEC.

En números concretos, en el final del año 2019, cuando asumió el actual gobierno, teníamos 3.600.000 (tres millones seiscientas mil) personas en condición de indigencia, y al final de junio pasado, eran más 4.000.000 (cuatro millones) las que estaban en esa situación, o sea un 10% más que el último tramo de la administración anterior.

Si bien en este tiempo hubo situaciones muy desfavorables como el advenimiento de la pandemia, que obligó a una retracción significativa del proceso productivo durante el 2020 con la consiguiente reducción del PBI del orden del 10%, también es cierto durante el 2021 la recuperación fue del mismo porcentaje, y que a lo largo de este primer semestre la progresión de la economía nacional siguió una dinámica de crecimiento similar. Sin embargo, la indigencia se mantuvo en niveles históricos muy altos.

En un tiempo en que los aumentos de los precios se fueron acelerando mes a mes, con los alimentos básicos siempre encabezando los aumentos, conviene ver como se desenvolvieron los salarios.

Cuadro de elaboración propia según datos obtenidos de nuestro Índice Barrial de Precios e información del INDEC.

Tomamos la evolución de la Canasta Básica de Alimentos (CBA) siguiendo la serie del INDEC, que publica un valor promedio mensual de la CBA para todo el país, y la del Índice Barrial de Precios (IBP) del conurbano bonaerense, que publica mensualmente para cada provincia. Para el seguimiento de los salarios, tomamos las series de Índices de Salarios que publica el INDEC, con el desagregado de los salarios no registrados que perciben la mayoría de los/as trabajadores/as cuyas remuneraciones están mayormente por debajo de la línea de pobreza.

En todos los casos los incrementos de los salarios no compensaron las subas de los precios.

Hace dos meses Sergio Massa asumió como Ministro de Economía y en este período de sesenta días recibió profusos elogios de los grupos económicos que controlan el movimiento del Mercado de Bienes, en particular de los exportadores de cereales que tomaron con alegría el beneficio del “dólar soja”, del sector financiero que pueden comprar bonos de la deuda pública con intereses atados a la evolución del valor de la inflación, y muy especialmente de los funcionarios del FMI. Actúa con el beneplácito de la conducción de las dos coaliciones políticas mayoritarias, tanto la del Frente de Todos, como la de Juntos por el Cambio.

La evolución de la inflación, en particular de los alimentos, que diariamente golpea los presupuestos de las familias más pobres –particularmente las que se encuentran por debajo de la línea de indigencia- claramente no ocupa los mismos niveles de preocupación en la conducción económica. Al igual que las anteriores, siguen el mismo camino de declaraciones insustanciales, anuncios de nuevos-viejos programas de “precios cuidados”, polémicas falsas con los formadores de precios con los que se reúnen en público para “retarlos”, mientras en privado acuerdan seguir el mismo camino.

En estos días vamos al Congreso Nacional a entregar un millón ochocientas mil firmas que recogimos en todo el país reclamando el tratamiento de la ley que congele los precios de los alimentos básicos por doce meses.

Si el gobierno y sus aliados tienen verdadera voluntad de encarar la problemática de la inflación para empezar a resolverla, deben avanzar por este camino. Otras propuestas como la de una reducción gradual: “bajar del 100% a que llegará este año, al 60% en 2023” como figura en la ley de presupuesto del próximo año, es un camino falso que no augura nada bueno.

LOS PRECIOS QUE MÁS SUBIERON EN LOS ÚLTIMOS DOCE MESES

Variación de de los productos de Verdulería. Según datos del IBP de septiembre 2022.
Variación de la Carne según datos del IBP de septiembre de 2022.
Variación de los productos de Almacén, según datos obtenidos por el IBP de septiembre de 2022.

*Isaac Rudnik es Director Nacional del Instituto de Investigación Social, Económica y Política Ciudadana (ISEPCI). Contacto: 11-41882603/ Prensa: 11-36483667


**Diseño de tapa: Manuela Rebori.